Agroisa te ayuda a convertir los residuos de la aceituna en subproductos para la industria alimentaria.

El sector oleícola a nivel nacional e internacional ha sufrido muchos cambios en los últimos años. Esto, puede considerarse una extraordinaria transformación que ha obligado a las almazaras a pasar de ser únicamente centros de transformación a verdaderas industrias agrícolas con una muy alta competitividad tecnológica. La cual, permita el máximo aprovechamiento de la materia prima, inclusive, en lo que respecta a los residuos de la aceituna en los procesos rutinarios

Convertir los residuos de la aceituna en subproductos para la industria alimentaria si es posible.

La maquinaria oleícola encargada de dar soporte técnico a la transformación de los residuos de la aceituna, ha sido de por sí uno de los ejes más importantes sobre los que ha girado el desarrollo tecnológico de esta industria. Pues, el aprovechamiento de los desechos es primordial en cuanto a rentabilidad económica, el desarrollo del medio ambiente y el crecimiento industrial amigable.

Agroisa lleva más de 25 años al frente de esta evolución, fabricando y comercializando limpiadoras y lavadoras de aceitunas, sistemas compactos de limpieza y lavado, cintas transportadoras, tolvas de almacenamiento, silos, sistemas de pesaje y, en la actualidad, desarrolla nuevas tecnologías que buscan convertir los residuos de la aceituna.

Recordemos que, sólo del 20% de una aceituna se extrae el aceite de oliva virgen. El 80% restante termina convirtiéndose en un subproducto conocido como alperujo, donde se integra la piel, la pulpa, el hueso y el agua del aceituna. Todo esto, gracias a las nuevas tecnologías puede ser totalmente aprovechable.

Un nuevo modelo de gestión de residuos en Europa.

Partiendo de este contexto, surge un proyecto europeo que reúne a socios de la industria alimentaria incluyendo a Agroisa. En el cual, la investigación y el sector académico buscan implementar un concepto integrado de gestión de residuos para la industria del aceite de oliva. Esta iniciativa persigue asumir el reto de dar un valor agregado, a mediano y a largo plazo, a los abundantes subproductos derivados de la extracción de aceite de oliva. Al mismo tiempo que,  se implementen medidas para el bajo coste y soluciones para el sector oleícola. La intención es poder mejorar la renta de todos los eslabones de la cadena de valor.

No obstante, el principal problema en la gestión del alperujo o residuos de la aceituna está plenamente enfocado en su producción. Pues to que, de acuerdo a la industria oleícola, la rentabilidad económica del alperujo puede verse comprometida por múltiples factores. Desde la producción, el clima, el equilibrio entre la oferta y la demanda del aceite de oliva, entre otros. Es por ello que, los avances tecnológicos han jugado un papel importante en la extracción del aceite de almazara. Siendo la maquinaria que extrae directamente el aceite de la aceituna la que puede garantizar que los residuos puedan convertirse posteriormente en subproductos.

Los productos derivados que se obtienen de la aceituna sirven para aumentar los recursos de la industria alimentaria.

Diversos proyectos de innovación han sido financiados por el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología. Abordando varios temas que en la actualidad están dentro de la industria del aceite de oliva. Permitiendo que, así, se pueda promover la circularidad total de los subproductos. Pues, está de más decir que, el Pacto Verde Europeo señala que todas las industrias deben trabajar hacia un futuro que sea sostenible. Es por eso que resulta una obligación reducir el impacto medioambiental de la industria del aceite de oliva, a través del aprovechamiento de los subproductos obtenidos. No sólo en lo que respecta a la producción de antioxidantes, también en lo que se refiere a la producción de energía, aplicación en los  suelos para mejorar la fertilidad e incrementar la productividad. Sin dejar a un lado la salud del olivo y la reutilización de las aguas.

Es bien sabido, además, que las tecnologías fabricadas por Agroisa ofrecen nuevas oportunidades de negocio en relación al sector primario y a los pequeños o medianos productores de aceite de oliva. Los cuales, en ocasiones se encuentran bajo una presión económica cada vez mayor. Siguiendo esta lógica, el aprovechar los subproductos obtenidos de la extracción del aceite de oliva resulta algo novedoso y eficiente. Además, la utilización de los subproductos naturales resulta un método bastante sostenible; siendo la clave del éxito para la supervivencia de los pequeños agricultores.